lunes, 28 de abril de 2014

Dos Papas Santos: San Juan XXIII y San Juan Pablo II
Fueron canonizados por el Papa Francisco acompañado por el Papa Emérito Benedicto XVI

San Juan Pablo II y San Juan XXIII, Rogad por nosotros (Imagen de la página de la Santa Sede)

Ayer fue un día verdaderamente emocionante en Roma. En la Plaza de San Pedro del Vaticano el Papa Francisco canonizaba a dos de sus predecesores: Juan XXIII y Juan Pablo II. Entre los presentes se encontraba también el Papa Emérito Benedicto XVI, por lo que muchos denominan a este día como el de los 4 Papas. Innumerables peregrinos (entre 800.000 y un millón de personas en Roma y cientos de millones de personas a través de la radio y de la televisión) participaron en esta ceremonia tan especial. Fue enorme el número de polacos presentes en las canonizaciones. Querían agradecer a su compatriota Juan Pablo II todo el bien que había hecho a la Iglesia Católica en general, y a su Patria en particular, durante su vida y su Pontificado.

La homilía del Papa Francisco fue, como de costumbre, concisa y emotiva. Reflexionando sobre el Evangelio del día, la incredulidad del Apóstol Santo Tomás (Jn 20, 19-31), afirmó de los dos nuevos Santos lo siguiente: Fueron dos hombres valerosos, llenos de la parresia del Espíritu Santo, y dieron testimonio ante la Iglesia y el mundo de la bondad de Dios, de su misericordia. Fueron sacerdotes, y obispos y papas del siglo XX. Conocieron sus tragedias, pero no se abrumaron. En ellos, Dios fue más fuerte; fue más fuerte la fe en Jesucristo Redentor del hombre y Señor de la historia; en ellos fue más fuerte la misericordia de Dios que se manifiesta en estas cinco llagas; más fuerte la cercanía materna de María. Además, designó a San Juan XXIII como el Papa de la docilidad al Espíritu Santo y a San Juan Pablo II como el Papa de la familia.

San Juan XXIII convocó el Concilio Vaticano II como un proceso de renovación de la vida cristiana en un momento complicado en la Historia del Mundo y de la Iglesia. Destacó por su bondad y cercanía, siendo merecidamente conocido como el Papa Bueno. Sus encíclicas contribuyeron a crear un clima de paz en un mundo dividido en dos bloques antagónicos: el mundo libre y las dictaduras comunistas.

Por su parte, San Juan Pablo II puso en práctica gran parte del Concilio Vaticano II ateniéndose al verdadero espíritu del mismo, evitando las desviaciones provocadas por los que querían una Iglesia Católica sometida a las modas mundanas y a las ideologías anticristianas (fundamentalmente, el marxismo materialista y ateo). Juan Pablo II fue un hombre de profunda oración, un viajero incansable que llevó la Palabra de Dios a todos los rincones de la Tierra, un luchador por la paz, la libertad y la justicia (contribuyó decisivamente a la caída de las terribles dictaduras comunistas y al fin de la Guerra Fría provocada por ellas), un defensor de los débiles, un amigo de las familias, de los niños, de los enfermos, de los ancianos y de los jóvenes (instituyó las Jornadas Mundiales de la Juventud), un defensor de la vida humana desde su inicio con la concepción hasta su muerte natural (especialmente recordada es su encíclica Evangelium Vitae).

Todos los que pertenecemos a la Iglesia Católica (y muchos cristianos, fieles de otras religiones y no creyentes) nos alegramos de estas canonizaciones. San Juan XXIII y San Juan Pablo II son dos grandes Papas santos de la misma Iglesia. No pertenecen a sensibilidades políticas o religiosas distintas, ni la canonización del uno sirve de coartada o justificación de la canonización del otro. Los que los contraponen (generalmente, ensalzando a San Juan XXIII y minusvalorando a San Juan Pablo II) se equivocan y muestran un desconocimiento de la realidad de la Iglesia. Además, lo suelen hacer desde una perspectiva de desprecio, o incluso odio, hacia el que acabó con las dictaduras comunistas y con una Iglesia acomplejada ante ellas.


miércoles, 23 de abril de 2014

Una magnífica Semana Santa en Gijón

Encuentro de Resurrección (Domingo de Pascua de 2014)

La Semana Santa de 2014 en Gijón fue, sencillamente, magnífica. Me refiero, claro está, a la Semana Santa en las Parroquias y en la calle. Todas las Procesiones, desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Resurrección, y el Via Crucis del Parque de Isabel La Católica pudieron celebrarse y lo hicieron con la belleza y dignidad propias de estas fechas. Este año la lluvia no impidió, como sí ocurriera el año pasado, la salida de las distintas Procesiones.

La labor de la Junta Mayor de Cofradías y Hermandades Penitenciales de Gijón (compuesta por la  Hermandad de la Santa Misericordia, que celebra esta año el 230º aniversario de su fundación, la Hermandad de la Santa Vera Cruz y la Cofradía del Santo Sepulcro), fue sobresaliente con una notable participación de cofrades y hermanos que procesionaron con gran fervor. Que Dios y la Virgen María les recompensen su esfuerzo.

Cada año las Procesiones de Semana Santa de Gijón se consolidan como un gran momento de presencia pública cristiana en nuestras calles. El número de fieles y turistas fue elevado y el comportamiento piadoso entre los fieles y, en general, respetuoso entre los turistas.

Por otro lado, la información aparecida en los dos periódicos locales sobre las Procesiones de Semana Santa en Gijón fue bastante correcta. En La Nueva España, Cuca Alonso mostró una mayor profundidad que Lucía Ramos, la periodista de El Comercio, aunque ésta también lo hizo bastante bien. Únicamente señalar que en los pies de foto aparecidas en El Comercio el día de Jueves Santo y correspondientes a la Procesión del Encuentro Camino del Calvario (Miércoles Santo) aparecía dos veces equivocadamente un Encuentro entre el Nazareno y la Virgen Dolorosa, cuando en realidad era con la Verónica. Por otro lado, ambas periodistas no acertaron a escribir correctamente que el Domingo de Resurrección se cantó el Regina Coeli, que es la oración que se reza en lugar del Angelus durante el tiempo de Pascua. De todas maneras, fueron pequeños gazapos que no empañan un buen trabajo.


Por último, recordar que el próximo año 2015 se cumple el 20º Aniversario de la recuperación de las Procesiones de Semana Santa en Gijón después de varias décadas de absurda desaparición. Será un buen momento para agradecer a las Cofradías y Hermandades Penitenciales su abnegación y buen hacer que nos permiten disfrutar de una Semana Santa más cristiana en las rúas gijonesas.

domingo, 20 de abril de 2014

Feliz Pascua de Resurrección

Paso de Cristo Resucitado (Domingo de Pascua de 2013)

 “Quita, María, ese manto, y revístete de gala, que viene resplandeciente el que por muerto llorabas”

REGINA COELI
Regina coeli, laetare, alleluia.
Quia quem meruisti portare, alleluia.
Resurrexit, sicut dixit, alleluia.
Ora pro nobis, Deum, alleluia.

Reina del Cielo, alégrate, aleluya.
Porque El que mereciste llevar en tu seno, aleluya.
Resucitó según dijo, aleluya.
Ruega a Dios por nosotros, aleluya.


Desde CANTÁBRICO queremos desear a nuestros lectores una Feliz Pascua de Resurrección

martes, 15 de abril de 2014

Celebraciones y Procesiones de Semana Santa en Gijón

Paso del Santo Cristo de la Misericordia y de los Mártires (Jueves Santo de 2013)

Como todos los años al llegar la Semana Santa, el pueblo cristiano de Gijón vuelve a mostrar públicamente, con respeto y devoción, su fe mediante la participación en los Oficios de Semana Santa y en las distintas Procesiones que, desde su recuperación en 1995, vuelven a mostrar la profundidad de estos días de Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. Es de destacar la hermosa y sacrificada labor de las Cofradías y Hermandades Penitenciales de Gijón a lo largo de todo el año, y especialmente en estos días de Semana Santa en los que su esfuerzo se multiplica. Pero, por amor al Señor Crucificado y a la Virgen Dolorosa, cualquier sacrificio es poco.

Este año las Celebraciones y Procesiones de la Semana Santa gijonesa desde el Martes Santo hasta el Domingo de Resurrección son las siguientes:
  • Martes Santo. Procesión de las Lágrimas de San Pedro o del Silencio. Sale a las 21:00 de la Iglesia Parroquial de San Pedro con los Pasos de la Flagelación y de las Lágrimas de San Pedro.
  • Miércoles Santo. Procesión del Encuentro camino del Calvario. A las 20:00 sale el Paso de Jesús Nazareno de la Iglesia Parroquial de San Pedro. A las 20:15 sale el Paso de la Verónica de la Capilla de la Soledad y a las 20:30 salen de la Iglesia Parroquial de San Pedro los Pasos de la Virgen Dolorosa y de San Juan Evangelista. A las 21:00 se producirá la Ceremonia y el Sermón del Encuentro en la Plaza del Marqués. El Sermón correrá a cargo del Rvdo. Don Luis López Menéndez, Párroco del Espíritu Santo de Gijón.
  • Jueves Santo. Misa de la Cena del Señor en las Parroquias de Gijón (a las 17:00 ó a las 18:00, en la mayoría de las Parroquias) y Hora Santa (a las 21:00 ó a las 22:00, según los sitios).
  • Jueves Santo. Procesión del Via Crucis del Santo Cristo de la Misericordia y de los Mártires. El Paso del Santo Cristo de la Misericordia y de los Mártires sale a las 20:00 de la Iglesia Parroquial de San Pedro.
  • Viernes Santo. Via Crucis en el Parque de Isabel La Católica a las 12:00 presidido por el Arzobispo de Oviedo, Don Jesús Sanz Montes, abierto a todo el que quiera participar y organizado por las Parroquias de San Antonio de Padua (Capuchinos), San Nicolás de Bari (El Coto), La Asunción (El Bibio), San Julián (Somió), Corazón de María y Beato Juan XXIII (Viesques).
  • Viernes Santo. Liturgia de la Pasión en las Parroquias de Gijón (a las 17:00 ó a las 18:00 en la mayoría de los sitios) y Via Crucis Parroquial.
  • Viernes Santo. Procesión del Santo Entierro de Cristo con salida a las 20:00 de la Iglesia Parroquial de San Pedro. Participan los Pasos de la Virgen Dolorosa, La Piedad al pie de la Cruz, el Santo Sepulcro y Nuestra Señora de la Soledad.
  • Sábado Santo. Vigilia Pascual en las Parroquias de Gijón (a distintas horas según las Parroquias).
  • Sábado Santo. Procesión de la Soledad de María con salida a las 9:00 de la Iglesia Parroquial de San Pedro. Participan los Pasos de Nuestra Señora de la Soledad y de San Juan Evangelista.
  • Domingo de Resurrección. Misas de Resurrección en las distintas Parroquias de Gijón. Horarios similares a los de cualquier domingo.
  • Domingo de Resurrección. El Paso de la Resurrección sale de la Basílica del Sagrado Corazón (la Iglesiona) a las 12:15, el Paso de la Virgen de la Alegría sale a las 12:00 de la Capilla de la Soledad y el Paso de San Pedro Apóstol sale de la Iglesia Parroquial de San Pedro a las 11:45. El Encuentro de Resurrección se llevará a cabo a las 12:45 en el Campo Valdés, frente al Colegio Santo Ángel.


lunes, 14 de abril de 2014

Viva España





En un día como hoy, desde CANTÁBRICO queremos mostrar nuestra adhesión a nuestros símbolos Nacionales: la Bandera (rojigualda), el Himno (la Marcha Real) y el Escudo (con la Corona Real rematada por la Cruz), frente a las banderas anticonstitucionales que portará la izquierda republicana por nuestras calles. 

viernes, 11 de abril de 2014

A las puertas de la Semana Santa
Se multiplican las convocatorias en nuestra Villa

Este Viernes de Dolores, 11 de abril de 2014, a las 20:00 y en la Iglesia Parroquial de San Pedro, se desarrollará un Concierto de la Coral Capilla de la Torre, dirigida por Don José Manuel Ovín de la Vega.

El Sábado de Pasión, 12 de abril de 2014, Don Paulino Tuñón Blanco pronunciará el Pregón de Semana Santa a partir de las 20:00 en la Iglesia Parroquial de San Pedro. A continuación, los Coros SineNomine (dirigido por Don Carlos Esperón) y el Parroquial de San Pedro (dirigido por Doña Calina Felgueroso) protagonizarán un concierto de polifonía religiosa.

El Domingo de Ramos, 13 de abril de 2014, se procederá a la Bendición de los Ramos a las 12:15 en el Pórtico de la Capilla de los Remedios. A continuación, Procesión de la Borriquilla.

Igualmente, en todas las Parroquias de Gijón se bendecirán los Ramos. En la de Nuestra Señora de Begoña (Padres Carmelitas), se llevará a cabo la tradicional Procesión de la Borriquilla por el Paseo de Begoña a partir de las 11:30.


miércoles, 9 de abril de 2014

Encuentros Interparroquiales Cuaresmales



Las Parroquias de San Antonio de Padua (Capuchinos), San Nicolás de Bari (El Coto), La Asunción (El Bibio), San Julián (Somió), Corazón de María y Beato Juan XXIII (Viesques) convocan unos Encuentros Interparroquiales Cuaresmales que consisten en lo siguiente:

  • Miércoles, 9 de abril de 2014. Charla de Don Javier Gómez Cuesta (Párroco de San Pedro de Gijón) sobre Una Encíclica para la Iglesia actual a las 20:00 en el Salón de Actos de la Parroquia del Corazón de María.
  • Viernes, 11 de abril de 2014. Celebración comunitaria de la Penitencia (con confesiones individuales) a las 20:00 en la Iglesia Parroquial del Corazón de María. Será presidida por Don José Juan Hernández (Párroco de Beato Juan XXIII de Viesques).

lunes, 7 de abril de 2014

El Callejero Nacional de Gijón
Los nombres de las calles de Gijón que fueron injustamente  eliminados por la izquierda por ser "franquistas” 




Con la llegada al poder municipal gijonés de los partidos de izquierdas (socialistas y comunistas) se produjeron numerosos cambios en el callejero local. Por un lado, se eliminaron los siguientes nombres de calles:
  • Los referidos a las víctimas de la violencia izquierdista anterior a la guerra de 1936 (Capitán Alonso Nart asesinado durante el golpe de Estado socialista y anarquista de octubre de 1934, Calvo Sotelo asesinado el 13 de julio de 1936).
  • Los que hacían referencia a la represión roja durante la Guerra Civil de 1936-1939 (Mártires, José Antonio, Hermanos Fresno, Hermanos Basterrechea, Hermanos Sánchez del Río, Hermanos Tuya, Manuel Rubio, Ramiro de Maeztu, Tomás Innerárity, Teniente Fournier, Cayetano Muñizales…).
  • Los que homenajeaban a los Caídos en combate  (Héroes del Simancas, Coronel Pinilla, Enrique Cangas, General Mola).
  • Los dedicados a los que contribuyeron al desarrollo gijonés durante el Régimen del Generalísimo Franco.
El ánimo revanchista y la ignorancia de los que perpetraron tal desafuero fue tan grande que entre los nombres de calles cambiados por ser “franquistas” se encontraban algunos como el del intelectual asturiano Vázquez de Mella (fallecido en 1928), o el del Tercio (unidad militar creada en el siglo XVI).

A su vez, la izquierda local dejó Gijón plagado de nombres de calles y monumentos de exaltación marxista y de ensalzamiento de los que formaron parte del bando rojo durante la Guerra Civil de 1936.

Es, por tanto, de justicia recordar los nombres de aquéllos que dieron su vida por Dios y por España y que forman parte de la Historia del mejor Gijón.


NOMBRE NACIONAL
NOMBRE ACTUAL
Calle del 18 de Julio
Libertad
Glorieta del Alférez Provisional
Campinos de Begoña
Calle del Almirante Riva
Puerto Rico
Avenida de Calvo Sotelo
Manuel Llaneza
Calle del Capitán Alonso Nart
Luciano Castañón
Calle de Cayetano Muñizales
Avda. de Castilla (integrada)
Calle del Comandante Caballero
La Costa (parcial)
Calle del Coronel Pinilla
Profesor M. Á. González
Plaza de la División Azul
General Riego
Residencia Sanitaria Doctor José Gómez Sabugo
Hospital de Cabueñes
Calle de Enrique Cangas
Begoña
Plaza de Fátima
Inst. Libre de Enseñanza
Avenida de Federico Mayo
Gaspar García Laviana
Avenida de Fernández Ladreda
Constitución
Grupo Francisco Franco
Santa Olaya
Calle del General Aranda
José Las Clotas
Calle del General Camilo Alonso Vega
Juan Alonso
Calle del General Dávila
Pachín de Melás
Avenida del General Esteban Infantes
Salvador Allende
Avenida del General Mola
La Costa (parcial)
Avenida del General Perón
El Molinón
Calle del General Primo de Rivera
17 de Agosto
Calle del General Solchaga
Martínez Marina
Calle del General Vigón
Blanca de los Ríos
Calle del General Zubillaga
Pablo Neruda
Plaza del Generalísimo Franco
Instituto
Calle de los Hermanos Basterrechea
Pintor Orlando Pelayo
Calle de los Hermanos Fresno
La Argandona
Calle de los Hermanos Llorca
Pintor Carreño Miranda
Calle de los Hermanos Paquet
Pintor Martínez Abades
Calle de los Hermanos Sánchez del Río
Pintor Marola
Calle de los Hermanos Tuya
Pintor Antonio Suárez
Ambulatorio de los Héroes del Simancas
Puerta La Villa
Avenida de los Héroes del Simancas
Pablo Iglesias
Colegio de los Héroes del Simancas
Los Campos
Universidad Laboral José Antonio Girón de Velasco
Universidad Laboral
Plaza de José Antonio
El Carmen
Grupo José Fidalgo
La Tejerona (nueva construcción)
Avenida de la Liberación
Carretera de Villaviciosa
Plaza de los Mártires
El Humedal
Colegio Manuel Rubio
Los Pericones
Calle de Montejurra
Enriqueta Ceñal
Calle de Oriamendi
Pérez de Ayala
Plaza de Oriamendi
Compostela
Calle de Primo de Rivera
17 de Agosto
Colegio de Primo de Rivera
Príncipe de Asturias
Calle de Ramiro de Maeztu
Tomás y Valiente
Calle de Salvador Moreno
Avelino González Mallada
Calle del Teniente Fournier
Travesía del Convento
Calle del Tercio
Camino de la Iglesia (Tremañes)
Calle de Tomás Innerárity
Vicente Innerárity
Calle de Vázquez de Mella
La Playa
Avenida de la Victoria
Muro de San Lorenzo
Jardines de la Victoria
El Náutico



jueves, 3 de abril de 2014

Dos bellas homilías de Monseñor Rouco Varela que algunos (los de siempre) critican

En los funerales de Estado por las víctimas de los atentados terroristas del 11 de marzo de 2004 y por el alma del expresidente del Gobierno Español, Don Adolfo Suárez


Monseñor Rouco Varela
(Fotografía tomada de la página de la Conferencia Episcopal Española)

Las homilías pronunciadas por Monseñor Rouco Varela en los Funerales de Estado por las víctimas de los atentados terroristas del 11 de marzo de 2004 y por el alma del expresidente del Gobierno Español, Don Adolfo Suárez, son un precioso ejemplo de caridad cristiana. Sus palabras reconfortan y acompañan en el dolor a los familiares y amigos de los fallecidos y dejan la puerta abierta a la esperanza. Animo a leerlas porque están llenas de fe, de esperanza, de caridad y de paz.



Después de haberlas leído creo que son grotescas las críticas contra Monseñor Rouco Varela. Se nota una agresividad oscura e injusta en la valoración de unas palabras medidas y conciliadoras. Hay que ser muy rebuscado (o cosas peores) para encontrarlas indignantes, impresentables, fuera de lugar…

Estas reacciones contra el Cardenal Arzobispo de Madrid en particular, y contra la Iglesia Católica en general, ya no nos sorprenden porque son la tónica habitual en los ámbitos de la izquierda y del separatismo. Hubiera dicho lo que hubiera dicho lo hubieran criticado igual. Sólo les vale el silencio de aquéllos que, como los cristianos, no pensamos ni actuamos como ellos. Lo que tampoco sorprende es la irracionalidad de esas críticas, su necedad, su pobreza intelectual, su odio indisimulado y su ignorante soberbia.

Es curioso que personas que se proclaman laicas, agnósticas, ateas o laicistas estén tan preocupadas por las palabras que expresa un Cardenal de la Iglesia Católica. Parece, más bien, que lo que los molesta es que siga existiendo la Iglesia en España.

Que suene el Himno Nacional Español en una Misa es algo normal. El Himno Nacional Español no debe escucharse sólo cuando lo autoricen ciertos políticos o en actos deportivos. Es la seña de identidad de nuestra Nación.

Vivimos en un Estado aconfesional, no laico, donde “los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones” (Artículo 16 de la Constitución Española). Si Don Adolfo Suárez era católico y quería un funeral católico, ¿por qué hay violar la voluntad del difunto y hacer un “funeral civil”? ¿En qué consiste eso? ¿Y por qué un funeral por el alma de un católico con una relevancia pública ha de ser un acto laico? No contenta la izquierda y los laicistas (perdón por la redundancia) con decirnos lo que debemos hacer en vida, ahora también quieren organizar los funerales de los muertos. ¿Por qué les molesta tanto a los que dicen defender las “libertades” que los católicos ejerzamos nuestra libertad religiosa y de expresión? Las reminiscencias del marxismo todavía siguen ahí.

Monseñor Rouco Varela afirmó que Adolfo Suárez “quería superar para siempre la guerra civil: los hechos y actitudes que la causaron y que la pueden causar”. ¿Es esto justificar una guerra, es llamar a iniciar otra? La Iglesia Católica no apoyó inicialmente el Alzamiento Nacional. Hubo de pasar más de un año (y que los rojos asesinaran a decenas de miles de consagrados y seglares) para que los Obispos Españoles escribieran su Carta Colectiva de apoyo a la Cruzada Nacional frente al totalitarismo materialista ateo. El Cardenal Don Antonio María Rouco Varela tiene todo el derecho del mundo a decir lo que dijo. Es más, la Iglesia Católica tiene 6.832 consagrados (Obispos, sacerdotes, religiosos, religiosas y seminaristas víctimas de la represión roja) y otras decenas de miles de seglares asesinados por comunistas (estalinistas), socialistas (favorables a la lucha de clases y a la dictadura del proletariado), separatistas y republicanos de izquierdas. No creo que los representantes ideológicos del bando que los asesinó tengan derecho a quitar la palabra (como antes hicieron con la vida) a los que discrepan de sus ideas.


miércoles, 2 de abril de 2014

75 años de Paz en España


Último Parte de Guerra firmado por el Generalísimo Franco
 

Desde el 1 de abril de 1939 España disfruta de uno de los períodos de paz más prolongados de su historia. Después de un cruento enfrentamiento entre españoles, hace 75 años finalizaba la última de nuestras guerras civiles. Fue el Día de la Victoria y el Día de la Paz. Ya desde el mismo día en el que se celebró el Desfile de la Victoria, el Generalísimo Franco animó a regresar a España “a los arrepentidos que de corazón quisieran colaborar en su grandeza”.

El balance de los 36 años que duró el Régimen del Generalísimo Franco es claramente positivo: en primer lugar, evitó la instauración de una dictadura de tipo soviético en España, logró la desaparición del hambre en España, se llevó a cabo la creación de la Seguridad Social (de la que tan orgullosos estamos), se produjo la desaparición del analfabetismo y la universalización de la enseñanza primaria hasta los 14 años, se dio un gran impulso a la educación secundaria, se intensificó la industrialización de nuestra Patria y, en definitiva, hubo un enorme desarrollo económico y social… En el escenario internacional, España se situó claramente en el bando del Mundo Libre durante la Guerra Fría frente a las dictaduras comunistas. En definitiva, el Régimen de Franco buscó un futuro mejor para todos y cumplió uno de sus lemas iniciales “ni un español sin pan, ni un hogar sin lumbre”.  En el lado negativo de la balanza están únicamente las restricciones a las libertades políticas y sindicales propias de un Régimen autoritario, aunque éstas se fueron atemperando con el transcurso de los años.

La muerte del Generalísimo Franco en 1975 produjo la transformación de su Régimen en una democracia en sólo dos años. Esto es debido a que la mayor parte de la evolución ya estaba en marcha desde antes de la muerte del Caudillo. Esta transición fue llevada a cabo por los mismos dirigentes franquistas con la colaboración de una oposición que entonces fue capaz de alcanzar el acuerdo fundamental de la Constitución de 1978 (acuerdo del que hoy se arrepiente la mayoría de la izquierda). Una Constitución que tiene muchos defectos, pero que buscaba la integración y el consenso de todos los españoles, en claro contraste con la republicana de 1931, sectaria y partidista. El esfuerzo común de todos los españoles permitió superar entonces la gran división producida por la guerra.

Sin embargo, la evolución de estos años de democracia no ha sido tan positiva. La amenaza separatista, las leyes injustas (sobre todo la del aborto, la equiparación de otras uniones al matrimonio, las leyes socialistas que empeoraron dramáticamente la educación…), el terrorismo (sobre todo el de la extrema izquierda separatista vasca), el aumento de las desigualdades regionales, la desindustrialización de nuestra Patria, el retroceso económico y social… están provocando una situación difícil. La izquierda y los separatismos, en una nueva reedición del siniestro (en todos los sentidos) Frente Popular, reniegan de la transición y quieren imponer una nueva Constitución federal, laicista y sectaria (como la de 1931), eliminando nuestra Bandera Nacional, nuestro Himno Nacional y nuestro Escudo Nacional.

Frente a estas pretensiones debemos oponernos con la razón, la inteligencia, la fortaleza, la fe, la esperanza y la caridad. Así, estos 75 Años de Paz logrados gracias a la Victoria de 1939 no serán un paréntesis en nuestra vida nacional.